jueves, 25 de diciembre de 2014

Parafraseando

Ser sabio significa que sabes que todavía no lo sabes todo, que todavía no lo haz visto todo, no lo haz hecho todo, no lo haz sentido todo.

Ser sabio significa que sabes que tienes un largo camino a recorrer para encontrarte con infinitas situaciones que te llevarán a aprender solo un poco más de lo que sabes.

Ser sabio significa que sabes que nunca debes dejar de aprender.

Ser sabio significa que sabes que sorprendentemente, la vida, no deja de sorprenderte.

Guillermo Prado Lima.

sábado, 20 de diciembre de 2014

Los empresarios exitosos

Cualquier persona que decida montar una empresa o ya tiene la suya, sueña con ganar dinero.
Jeff Sandefer cita: "Los empresarios se convierten en exitosos, mediante pequeñas inversiones, en un proceso sin fin. El éxito empresarial no es un destino, sino un viaje. Un viaje paso a paso, un solo paso a la vez, creando poco a poco el tesoro de toda la vida."
Pero detrás de esa visión y de ese paso a paso que tienen esos empresarios exitosos, también debe haber un adecuado nivel de entendimiento, entre él y el trabajador. Se deviene así algo que es, a mi entender, un importante eslogan: detrás de todo gran empresario siempre hay un empleado eficaz, sea hombre o mujer.
La clave para estos empresarios que crecen ha sido la capacidad de elección, también, de las personas que trabajan en su compañía. Se deduce, entonces, que el empleo no es siempre, como algunos piensan, sinónimo de inoperancia para la empresa.
No existe una receta mágica para conseguir el triunfo, pero el factor que más influye en el crecimiento de las empresas es la calidad de las personas que trabajan para su compañía.
Ser emprendedor no es una tarea muy fácil, tener éxito menos aún. Todos los empresarios de éxito, saben que tienen que cuidar los recursos humanos de su empresa.
Recuerdo haber leído, a finales del Siglo XX, algo que me llamó poderosamente la atención y quedó impregnado en mi cerebro. En esa época, la empresa más dinámica de Europa era Telepizza, una pizzería española, creada por un tal Pujals, que ahora es una cadena multinacional con presencia en varios países, incluso en la Argentina (busquen su página en Facebook). Pujals decía que la primera barrera para montar un negocio se encuentra en nuestra propia mente. La razón es, señalaba, que "nos han educado para trabajar para otros".
Pero no solamente son los empresarios creadores del negocio los que tienen éxito, están aquellos que siguiendo la tradición familiar se hacen cargo del mismo, desenvolviéndose con la misma capacidad o aún mayor y que pasaron algunos años de rodaje adquiriendo experiencia. Y, para ellos, la formación continua es muy importante.
Hace un par de meses atrás, tuve la oportunidad de charlar con una persona que, siguiendo la tradición, se hizo cargo del negocio familiar. Me demostró que para salir airosos en el negocio, tiene una mezcla de condiciones innatas y otras adquiridas con el aprendizaje y desarrolladas con la experiencia.
A minutos nomas de comenzada la charla, me dí cuenta de su estrategia de negocio, del olfato que tiene, y que sabe vislumbrar donde hay una oportunidad. Que tiene una excelente habilidad negociadora y capacidad de comunicación, que, por mi experiencia, no todos la tienen. También demostró que lo más importante es el desarrollo en equipo. Que es una persona creativa y hábil para innovar en situaciones críticas, capacidad de liderazgo, y sabe ganarse la confianza y la lealtad de las personas que la rodean. ¿Se podría agregar algún ingrediente más? Sí: habilidad para orientar a las personas en cuanto su objetivo, un sentido autocrítico y mucha confianza en si mismo.
Si habla del perfil de trabajador, quiere un empleado exitoso junto al desarrollo de la empresa, sensible a los requisitos del cliente, y sensible también a los requisitos de sus propios compañeros. Más allá de la edad que este empleado pueda tener, 20, 40, 50 o más (
o a la hora de elegir alguien nuevo), busca en sus empleados la capacidad de trabajo en equipo, la iniciativa personal, la habilidad para resolver problemas y las capacidades de comunicación. Prefiere personal que se identifique plenamente con el conjunto y con la idiosincrasia de la empresa. Es decir, como idea básica, una persona se hace valiosa dentro de la propia empresa cuando proporciona valores.
Eso es fundamental en un empresario exitoso, valorar a su equipo, capacidad de reacción y, al mismo tiempo, que sepa escuchar y sea afable con quienes tiene a cargo.
Si quieres que tu empresa crezca, avance y se afiance en este mercado competitivo, estos dos ejemplos son de vital importancia. Trabajando en equipo se logran grandes metas.

miércoles, 17 de diciembre de 2014

Palabras desde el corazón

Buscando otras cosas, encontré esto que escribí, allá por el 2007. Quise recordarlo y ponerlo en este medio, porque a veces muchos pasamos situaciones similares.
Comenzaba así:

El llanto se deja escuchar en el corazón, buscando una luz...
Aquella pequeña llama en medio de la total oscuridad.
Pero ese llanto es tan profundo que oprime... Oprime hasta que duele...
Ya no puedes distinguir entre la belleza y la crueldad... La belleza de la oscuridad y la crueldad de esa misma vida... Duele demasiado.
Te entiendo.
Aprendiste a callar cuando te duelen las palabras...
Aprendiste a bajar la vista cuando duelen las miradas...
Aprendiste a abrazar cuando, solo, hoy quieres que te abracen...
Aprendiste a perdonar...
Te entiendo.
Pero solo un alma desnuda, como la que estas forjando... solo un alma desnuda, descubre los sueños.
Esos sueños que harán que lo que descubras sea más grande.
Esos sueños que harán que el coraje aflore en los más finos capilares de tu piel.
Y algún día todos estos momentos serán un recuerdo.
Decían las primeras palabras de Desiderata: "Anda plácidamente entre el ruido y la prisa, pero mira la paz que puede haber en el silencio..."
Y como esas palabras... En el silencio de tu interior, busca la paz.
Despierta entre los besos de los rayos de sol que se escurren a través de tu ventana.
Despierta con la sonrisa que solo puede darte el amor.
El amor que te alcanza en un abrazo tierno.
Ama en silencio a una figura extraña.
Ama tu vida.
Ama a tus hijos.
Ama a tus padres.
Ama sin razón.
Ama en la locura.
No importa a quien.
No importa si es real o no.
AMA.
Cuando tu vida se llene de amor... de la locura del amor... todos los momentos crueles se irán cerrando y la belleza de la vida irá ganando espacio.
Y con la belleza en tu vida, tomarás decisiones que ni siquiera puedes ver con tus ojos cegados por la pasión del enfrentamiento.
Hoy estoy acompañando tu alma, desde la razón de las palabras.
Simplemente quiero que sepas que alguien piensa en vos.
Sin pedirte nada a cambio. Sin obligarte a nada.
Solo expresando en un teclado que va hilvanando el fluir del corazón.
Porque se que del otro lado de la pantalla estas vos... y desde tus ojos al corazón.
No te abrazaré en persona, ni pondré mi hombro para que te desahogues, porque muchos kilómetros nos separan, solo esperaré que mis palabras lleguen a lo más profundo de tu ser.
Te quiero, amiga.


Dicen que los hombres no deben llorar...


Llorar hace alusión a debilidad, sensibilidad, inseguridad… así se exhorta a los niños y a los hombres, socialmente, a no llorar… a reprimir el llanto… - “No llores, no seas maricón”, escuché miles de veces en las escuelas, en las calles, en el hogar… como una sentencia impuesta tanto por padres… abuelos… hermanos… amigos… la sociedad en general…Nadie quiere llorar, esa es una verdad… Pero, qué pasa cuando tienes un nudo en la garganta y no puedes hablar… qué pasa cuando estás angustiado… cuando tienes una pena… cuando tienes esa congoja que te aprieta el corazón… cuando sientes comentarios dañinos… cuando te dan una mala noticia… cuando te revientas de rabia… cuando te pones esa máscara para verte más fuerte y no mostrar tus sentimientos… cuando tienes empatía con esa persona que está a tu lado llorando…Miren… biológicamente, al llorar, se elimina una parte de adrenalina, noradrenalina, además de opiáceos endógenos, que provocan el mismo efecto que un analgésico. Ni hablemos de la oxitocina... y lo voy a explicar de una forma sencilla… cuando una mamá está cerca de sus hijos y ellos sienten una sensación de calma, es que está liberando oxitocina… es decir, se liberan hormonas de bienestar…Todo eso pasa cuando lloramos… pero no solamente lloramos cuando estamos mal… muchas veces cuando tenemos una alegría intensa… cuando nuestra felicidad es desbordante…Además, "los adultos lloran cuando se sienten impotentes ante un suceso concreto, para aliviar la tensión, eliminar la tristeza y comunicar cómo se sienten". Ante todas esas certezas, muchos expertos no dudan: el principal beneficio de llorar es su efecto como calmante natural. Permite reducir la intensidad de las emociones fuertes y trabajar con ellas para solucionar problemas. Asi argumentan, Molero y Planella. A medida que las lágrimas resbalan por las mejillas, "disminuye el nivel de angustia", dice Planella. "Poco a poco la persona se relaja, se calma, se reduce la carga emocional y aumenta la lucidez para trabajar desde una parte más racional. El afectado consigue que esas emociones intensas se hagan más pequeñas y manejables", explica Molero.Nadie quiere llorar, esa es una verdad… Pero, qué pasa cuando tienes un nudo en la garganta y no puedes hablar… qué pasa cuando estás angustiado… cuando tienes una pena… cuando tienes esa congoja que te aprieta el corazón… cuando sientes comentarios dañinos… cuando te dan una mala noticia… cuando te revientas de rabia… cuando te pones esa máscara para verte más fuerte y no mostrar tus sentimientos… cuando tienes empatía con esa persona que está a tu lado llorando…Miren… biológicamente, al llorar, se elimina una parte de adrenalina, noradrenalina, además de opiáceos endógenos, que provocan el mismo efecto que un analgésico. Ni hablemos de la oxitocina... y lo voy a explicar de una forma sencilla… cuando una mamá está cerca de sus hijos y ellos sienten una sensación de calma, es que está liberando oxitocina… es decir, se liberan hormonas de bienestar…Todo eso pasa cuando lloramos… pero no solamente lloramos cuando estamos mal… muchas veces cuando tenemos una alegría intensa… cuando nuestra felicidad es desbordante…Además, "los adultos lloran cuando se sienten impotentes ante un suceso concreto, para aliviar la tensión, eliminar la tristeza y comunicar cómo se sienten". Ante todas esas certezas, muchos expertos no dudan: el principal beneficio de llorar es su efecto como calmante natural. Permite reducir la intensidad de las emociones fuertes y trabajar con ellas para solucionar problemas. Asi argumentan, Molero y Planella. A medida que las lágrimas resbalan por las mejillas, "disminuye el nivel de angustia", dice Planella. "Poco a poco la persona se relaja, se calma, se reduce la carga emocional y aumenta la lucidez para trabajar desde una parte más racional. El afectado consigue que esas emociones intensas se hagan más pequeñas y manejables", explica Molero.
Particularmente, y no me da vergüenza decirlo, en mi vida lloré muchísimas veces de tristeza o impotencia... para no retroceder demasiado en el tiempo, por la cantidad de víctimas en la explosión de calle Salta aquí en Rosario, por los desaparecidos y asesinados en Ayotzinapa, México, por la muerte de mi padre... Pero también lloré muchísimas veces de alegría o emoción... por los logros académicos de mis hijas, por la fortaleza de mi madre, por el reencuentro de una persona muy amada que no veía desde hace más de 30 años, cuando escuché de mi nieta su primer "abuelito Wali"...
Como reflexión final… tal vez te sorprenda que hable del llanto como remedio de la tristeza, porque llorar es exteriorizar el sufrimiento interior. El llanto auténtico es el que expresa una pena sentida, descubriendo la impotencia y el daño. Si tomamos conciencia, es el lenguaje de la tristeza y el miedo, como cuando se dice que ya no podemos seguir amando, que sufrimos un mal no merecido, o no esperado… pero… en el otro extremo, se puede llorar de emoción, y de una emoción alegre, en especial cuando se alcanza algo deseado o se recupera a una persona que se creía perdida, por ejemplo…Ahora… vos… hombre… llorar: “¿Qué es para vos?”… ¿Mostrar debilidad o mostrar que realmente tienes un corazón sensible? Porque el corazón sensible no distingue entre sexos… Te invito a demostrar que también hay un corazón sensible dentro tuyo, que puedes llorar por una pena… pero, también, por una inmensa alegría... sin perder tu hombría...

Extraído de mi página: facebook.com/HistoriasDePendolario

viernes, 5 de diciembre de 2014

Los comentarios despectivos

Déjenme hacer una breve historia antes de comenzar a desarrollar este tema que me apasiona. Como me apasiona escribir y volcar ideas que son las que padecemos mucho.
Erase una vez, una empresa familiar en los albores del inicio de su actividad. Una empresa con dueños de buena onda que decían: “Somos una familia”. Y los trataban como tal a sus empleados. Justamente, ellos, los empleados, lo sentían de igual forma. Eran épocas de invitaciones a asados, cumpleaños. Cualquier escusa servía para juntarse. Hasta se escuchaban los comentarios entre los compañeros que no les pesaba levantarse para ir a trabajar porque, verdaderamente, se sentían contentos de compartir horas de actividad laboral.
Como estaba ubicada, en lo que yo diría una isla floreciente, dentro de un país con serias dificultades, su crecimiento fue exponencial. Pero ese crecimiento trajo aparejado cambios de actitudes. Llegó otra gente que fue socavando, lenta pero sin pausa, debilitando a algunos de los que habían comenzado con la empresa. Usando todo tipo de ardides. Hasta invitaban a algún empleado a su casa, para sacar valiosa información sobre los “adversarios”. Y cumplieron con su cometido. La facilidad de envolver con las palabras dan sobrada muestra de una habilidad que muy pocos tienen. Los que humanizaban el trato con sus subalternos, habían dejado su lugar. Ya no estaban. Quedaron los que habían sido envueltos en la telaraña.
Supongo que a muchos de ustedes les ha pasado.
Pero entrando ya en el tema, sucede que hay personas en las altas esferas de las empresas, que hacen gala de su poder. No son todos. Pero que los hay... los hay. Llegando al punto de hacer comentarios despectivos hacia alguien. Si uno es un profesional, tiene escuela, y es además inteligente, no trataría, y disculpen el término que voy a usar, pero es el único que me cabe, como un “sorete” a sus empleados. Como trabajador, uno se puede equivocar o dejar de hacer algo por olvido o por el exceso de tareas, ya que uno es “humano”, pero no tiene que soportar denigrantes comentarios de quienes se creen superiores (solo por el rango).Ahora, cómo podemos reaccionar ante tal situación. Según los psicólogos, conviene contenerse y dominar ese primer impulso de responder de la misma manera. A mí, a decir verdad, me cuesta mucho, pero intento de encontrar una explicación de por qué esa persona actúa de esa forma. No todos somos iguales. Lo complicado es cuando, ese comentario despectivo, causa daño.
Uno ha vivido mucho, tiene demasiada experiencia de situaciones similares que se viven en la vida cotidiana. Pero esos comentarios, dichos por personajes de mala entraña, pueden causar mucho daño si la persona es frágil.
Supongo que en más de una ocasión deben haber tenido la certeza de que alguien del entorno les tiene animadversión o sencillamente no siente simpatía hacia ustedes. Tengan presente, entonces, que lo importante es no reaccionar ante la hostilidad con los mismos medios, a veces es mejor hacer oídos sordos o contestar adecuadamente, ya que demuestras una mayor educación de quien cree estar muy por sobre ti.
Continuará...